Según explica la dermatóloga Arantxa Torrijos, "esta innovadora tecnología nos permitirá posicionarnos como un referente en la provincia en el tratamiento de lesiones no susceptibles de ser abordadas con los métodos convencionales". La técnica, añade, resulta muy efectiva en tumores dérmicos de mayor profundidad y grosor que no pueden ser tratados con otras técnicas no invasivas.
La nueva estrategia terapéutica, ya probada en pacientes con resultados satisfactorios y más eficaces que los tratamientos convencionales, consiste en inyectar en la zona a tratar una sustancia fotosensibilizante. Hasta ahora, la aplicación del producto fotosensible era tópica y, por tanto, no podía penetrar lo suficiente como para tratar lesiones profundas.
Ahorro económico
Tras un periodo de absorción de la sustancia, que oscila entre una y tres horas en función del tamaño de la lesión, se somete al paciente a una radiación con luz láser a través de una fibra óptica. El procedimiento consigue destruir de forma precisa y selectiva el tejido patológico preservando el sano. De esta forma, se acortan notablemente el periodo postoperatorio, el tiempo de convalecencia y la recuperación del paciente.Además de la mínima baja socio-laboral para los pacientes en comparación con el sistema tradicional, el ahorro económico es considerable al eliminar el uso de un quirófano, anestesia general, ingresos hospitalarios y curas, puesto que el procedimiento se realiza en la consulta. El Servicio de Dermatología estima tratar inicialmente dos pacientes a la semana e incrementar el número a cinco conforme aumente la curva de aprendizaje.