
Las defunciones maternas en el mundo "se redujeron de 532.000 en 1990, aproximadamente, a unas 303.000 en el presente año", continúa la OMS, que añade que "se ha descendido hasta una tasa de mortalidad materna del orden de 216 defunciones maternas por cada 100.000 nacidos vivos, frente a 385 en 1990".
A juicio de la subdirectora general del Departamento de Salud de la Familia, la Mujer y el Niño de esta Organización, la doctora Flavia Bustreo, que informa de que "se entiende por mortalidad materna el deceso de una mujer durante su embarazo, parto, o dentro de las seis semanas después de su término", las citadas metas establecidas con anterioridad "han dado un impulso sin precedentes en la reducción de la mortalidad materna".
Para 2030, "es posible poner fin casi por completo a estas muertes"
Sin embargo, la representante de la OMS considera que "no es suficiente", ya que "para 2030, es posible poner fin casi por completo a estas muertes", algo en lo que afirma que se comprometen "a trabajar para lograrlo". El director Ejecutivo de UNFPA, el doctor Babatunde Osotimehin, manifiesta, por su parte, que ello "requerirá un esfuerzo mucho mayor"."Si en los próximos 15 años no aumenta el número de matronas y de otros trabajadores sanitarios con conocimientos obstétricos, los avances en muchos países con altas tasas de mortalidad materna pueden ser lentos e, incluso, pueden revertirse", prosigue este profesional sanitario, que concluye afirmando que "es necesario dar un gran paso adelante ahora".