
Así, la zona oriental de la Región "registró más de 130.000 nuevos diagnósticos de VIH, el número más alto en la historia", tal y como afirma este organismo internacional. Por otro lado, los países de la Unión Europea (UE) y del Espacio Económico Europeo (EEE) informaron de una disminución en las tasas de nuevos diagnósticos, "impulsada principalmente por una disminución del 20 por ciento desde 2015 entre los hombres que tienen sexo con hombres".
La directora regional de la OMS para Europa, la doctora Zsuzsanna Jakab, señala que "es difícil hablar de buenas noticias ante otro año de números inaceptablemente altos de personas infectadas con el VIH. Mi llamamiento a los Gobiernos, a los ministros de Salud y a los responsables de la toma de decisiones es audaz: amplíen su respuesta ahora". En este sentido, agregó que “para apoyar a las personas que viven con el VIH y proteger a las personas con mayor riesgo de infección, debemos acelerar las acciones adaptando las intervenciones. Esto significa invertir sabiamente en prevención, pruebas y tratamiento, especialmente en poblaciones clave para poner fin a la epidemia de sida, como prometimos”.
Asimismo, el comisario de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis, destaca que, a pesar de los esfuerzos, "el VIH todavía daña la vida de muchas personas y causa no solo mucho sufrimiento y enfermedades, sino también discriminación y estigmatización. Se ha avanzado mucho, pero todavía hay mucho más que debemos hacer. Necesitamos capitalizar todo el potencial de nuestras acciones conjuntas y sostenidas, así como una mayor colaboración con nuestros socios a través de las fronteras si queremos alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible de eliminar el VIH, en Europa y en todo el mundo, para el 2030".