En la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo (ENVI) se hicieron públicas estas recomendaciones, destinadas a que no haya ciudadanos en la Unión Europea en situación o riesgo de falta de acceso a los medicamentos que precisen para preservar y mejorar su salud. El documento fue auspiciado por el PSOE, contando con el respaldo inmediato de la Alianza Progresista de Socialistas y Demócratas (APSD, abreviado S&D). En todo el proceso, está teniendo un papel determinante la eurodiputada del PSOE Soledad Cabezón.
Soledad Cabezón
Poderes de la Unión
El texto parte del hecho de que el actual acceso a medicamentos es insuficiente en Europa para una parte muy destacable de sus ciudadanos, afectando negativamente a su salud y su bienestar. Algo que contraría el objetivo esencial de la Unión Europea (UE) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) destinado a que los europeos tengan acceso a medicamentos bajo precios razonables, ya que dentro de la Carta de los Derechos Fundamentales asumida por el continente se incluye el del acceso a la salud preventiva y beneficiarse de la atención médica. Como causas de estas diferencias de acceso, el grupo socialista-demócrata europeo señala a la crisis económica que ha sacudido la Unión todos estos años y a los recortes adoptados por los Gobiernos en materia sanitaria.Independencia de la EMA
El documento también aboga por defender la independencia y transparencia de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) a la hora de evaluar y aprobar la comercialización de medicamentos, bajo los principios de alta calidad, seguridad y eficiencia. De igual forma anima a que esta institución panaeuropea reduzca los tiempos en que la innovación terapéutica alcanza el mercado, al hilo de los dictados del artículo 81 de la directiva europea 2001/83/EC, sobre disponibilidad de medicamentos en situaciones de escasez o desabastecimiento. El texto también recuerda que Europa debe estar alerta ante las prácticas anticompetencia que puedan surgir en los países miembros y ante los riesgos de que los precios de medicamentos puedan ser engrosados de forma artificial.Transparencia en los precios de medicamentos
El documento demanda una mayor transparencia por parte de la industria farmacéutica a la hora de comercializar medicamentos en todos los países miembro, evitando la adopción de acuerdos confidenciales y precios diferenciados. Se insta, igualmente, a fomentar la adquisición conjunta de vacunas y otros medicamentos por parte de los Estados miembros, lo que, explica, fortalecería su poder de negociación, lo que conduce a una reducción de los precios de compra y, por tanto, de costos para los pacientes. Por ello, el documento solicita la retirada de la directiva europea 89/105/EEC, de cara a que los respectivos Gobiernos puedan tener un control más efectivo sobre los precios de los medicamentos y sus condiciones de reembolso y financiación.De la misma forma, pide a los desarrolladores de fármacos que encuentren un equilibrio necesario entre sus costes de investigación y el precio adecuado que deben tener los medicamentos para los ciudadanos. Petición plenamente compatible con la comprensión que tienen los europarlamentarios hacia los altos costes de investigación y desarrollo que siempre deben afrontar las compañías farmacéuticas, aunque pidiéndoles también que sean más transparentes al informar sobre dichos costes de inversión. Información que será necesario complementar con los datos que se generen en los ensayos clínicos, a raíz de la nueva legislación europea específica.