Punto de vista
Ante el bajo impacto que, sobre el gasto del SNS, están teniendo los Precios de Referencia, el autor aboga por dejar libres los precios de los medicamentos genéricos para que puedan competir con las marcas
Para quienes seguimos la evolución del mercado de medicamentos que financia el Sistema Nacional de Salud, fue una enorme sorpresa comprobar la disparidad de los datos de impacto que suministró la consultora IMS sobre la Orden de Precios de Referencia del año 2014 y el impacto real sobre las Oficinas de Farmacia y los usuarios que calculó el Ministerio de Sanidad. IMS calculó un impacto de 437 millones de euros, mientras el Ministerio publicó en una nota de prensa que el impacto para las oficinas de farmacia ascendía a 43 millones de euros.
¿Quién llevaba razón?
La diferencia de 394 millones nos hizo inmediatamente pensar que uno de los dos estaba equivocado, o que había manipulado los datos. De IMS no podíamos dudar porque es una empresa que maneja el “big - data” de medicamentos a nivel mundial, y un fallo de estas características podría tener consecuencias para los responsables de la filial en España, así que lo fácil hubiera sido pensar en una manipulación política, por parte del Ministerio.Sobre la Orden de Precios de Referencia de 2014, IMS calculó un impacto de 437 millones de euros, mientras el Ministerio publicó que el impacto para las oficinas de farmacia ascendía a 43 millones de euros.Cuando fueron transcurriendo los meses a partir de septiembre de 2014 nos dimos cuenta que el mercado no descendía y que el gasto medio por receta sólo lo hacía levemente, así que comenzamos a estudiar las causas de la disparidad de estas cifras y por qué el Ministerio podía llevar razón.La primera causa de la diferencia hay que atribuirla a que IMS había dado el dato del mercado total – incluyendo el consumo hospitalario y el mercado privado – pero, aún así, no era suficiente.Al fin encontramos la explicación en el Real Decreto Ley 8/2010 que impone unas deducciones del 7,5% y el 15%, según los casos, a todos los medicamentos que se encuentran fuera de los precios de referencia. Si un producto pasa a estar incluido en precios de referencia no tiene que pagar esas deducciones, por lo que si la bajada de precios es inferior a esos porcentajes, en lugar de perder dinero con la bajada de precios, gana margen. Y esto, favorece tanto al laboratorio, como al almacén y la farmacia; y también, el coste para el Sistema Nacional de Salud puede aumentar, en lugar de disminuir.
Aumento ligero del margen
En los meses transcurridos hemos constatado que las farmacias han aumentado muy ligeramente su margen (un 0,2%) al no tener que pagar esas deducciones, y el Sistema Nacional de Salud ha tenido que pagar más, porque ha dejado de percibir el 7,5% o el 15%, según los casos. Y bastantes laboratorios también se han beneficiado, cuando se han incluido sus productos en precios de referencia, y dejado de pagar esas deducciones. Así que, la gran paradoja, de que bajando los precios e incluyendo nuevos productos en precios de referencia, se mantiene el mercado, podía ser explicada.Ahora el Ministerio anuncia una nueva Orden de Precios de Referencia de características más limitadas que la anterior. IMS calcula un impacto total de 143 millones de euros, con la característica de que un 44% del impacto se concentrará en los conjuntos homogéneos nuevos, y fundamentalmente sobre los medicamentos de marca, que disminuirán su valor en menos del 13%.El Ministerio no ha ofrecido datos de impacto (de la nueva Orden de Precios de Referencia) sobre las farmacias y estimamos que puede ser insignificante