
"Los países con mayor concienciación de CDI posiblemente han podido reducir los brotes de las cepas de C. difficile más virulentas mejorando el diagnóstico inicial de esta infección normalmente asociada al entorno hospitalario", dijo el profesor Mark Wilcox, profesor de Microbiología médica, Leeds Teaching Hospitals y University of Leeds. "Este estudio destaca que es esencial que mejoremos la implementación de las pruebas de CDI en los hospitales, para abordar el problema de la creciente incidencia de CDI en Europa", añadió.
El estudio europeo multicentro, prospectivo, transversal de prevalencia, bianual de la infección por CLostridium difficile en pacientes hospitalizados con diarrea (EUCLID) implicó 482 hospitales de 20 países europeos. Estos resultados completos comparan los datos recogidos en dos días independientes, uno en invierno de 2012/13 y otro en verano de 2013. En cada uno de los días asignados, los hospitales participantes entregaron las muestras fecales no formadas recibidas a los respectivos laboratorios de coordinación nacional (NCL) de EUCLID. En total, se presentaron 7.181 muestras fecales por los hospitales participantes.
Los resultados de este estudio destacan cambios recientes recogidos en las Guías de metodología y Diagnostico de la CDI en Europa, resultando en la mejora de las políticas de diagnóstico y selección de los métodos de laboratorio. Los datos muestran que las tasas de falsos positivos se redujeron entre los dos días de estudio en los países donde se habían mejorado los procedimientos y métodos de diagnostico. A pesar de esto, más del 50 % de los hospitales aún no utilizan el procedimiento diagnóstico más preciso para la CDI y más de un quinto (21,8 %) de las muestras que resultaron ser positivas para CDI en el NCL no lo habían sido a nivel hospitalario local. Además, los hallazgos revelan que más de la mitad (52,1 %) de los hospitales en Europa sólo prueban la CDI previa petición del médico.
"Las directrices recomiendan realizar las pruebas hospitalarias para la CDI en deposiciones no formadas cuando la diarrea no está clara. Sin embargo, estamos viendo un problema con una falta de sospecha clínica y la falta de pruebas diagnósticas para la CDI", comentó el profesor Mark Wilcox. "La CDI es una enfermedad que causa gran sufrimiento a los pacientes y una gran carga económica a los hospitales europeos. Estos resultados revelan que aún queda mucho por hacer para optimizar el tratamiento y prevención de la CDI", agregó.
El estudio EUCLID se está coordinando por la Universidad de Leeds, Reino Unido, por el grupo de investigación de Mark Wilcox, con apoyo del EUCLID Core Group. El estudio se inició y respaldó financieramente por Astellas.